Cuentos que eran, son y serán


 Episodio del 9 de abril  de 2021

Palabras por Julie Catherine Guardo Quintero

El espectador
 
Murió y quise llamarlo a preguntarle cómo.

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Palabras por Daniela Alejandra Galeano Camacho


La fila

 

Esta historia que fue breve es tal vez eterna, los lazos se cruzan, las vidas no tienen final ni comienzo y todo en algún momento vuelve a pasar. Esta historia tal vez fue breve, tal vez será breve, tal vez nunca será. Este escritor perdido en el tiempo sólo teme de una cosa, salir de su bucle de presente verdad.

 

Cuando llegamos a la fila había ya antes de nosotros muchos más, era larga, será larga, es larga la espera de aquellos que esperamos algo inexistente.

Un padre. Es el joven mas popular de su escuela, hijo ejemplar, hermano algo descuidado, pero siempre atento en el peligro, es de esos que sienten la vida con intensidad. Se casa a los dieciséis con su novia de bachillerato porque esperan un hijo luego de una noche de copas. Se divorcia y se vuelve a casar, pero nunca logra volver a amar con tanta pasión como la primera vez. Está parado en la fila, en el puesto de adelante. Fue, es y será se pasan volando frente a sus ojos, se siente impaciente, pero nunca la espera es tan larga para el.

Dos personas más adelante está el chico de cabello rojizo. Lleva siempre sus baquetas en el bolsillo, va escuchando a su banda favorita. Es un niño rebelde, tan rebelde como se puede llegar a ser en la primaria, siempre un hijo problemático, desinteresado y arrebatado. Se construye una coraza en el bachillerato, una pinta de chico malo y evita hablar si no es para citar canciones. Está parado en la fila. Fue, es y será se miden para el con la duración de las canciones en su lista de reproducción, en realidad nunca le ha importado, contar no es para el y siempre lleva el reloj atrasado.

La mujer que se acaba de parar atrás es la tía de los mensajes en cadena, de los consejos de coqueteo y las revistas de famosos sin camisa. En el bachillerato siempre la del rincón, la tímida, pero popular, inexperta aunque intente aparentar lo contrario. Es la hermana culpable en silencio, la que las hace y luego esconde la mano. Llegan y llegan mensajes a su celular y no deja de ver memes y enviar chistes en el grupo familiar. Está parada en la fila. Fue, es y será son para ella más infinitos que la infinidad, ella ve el bucle, pero, como siempre, prefiere callar y concentrar sus fuerzas en el joven galán de la cuenta pública que tiene siempre abierto en una ventana del celular.

Los novios de más atrás, se acaban de casar. Reviven con cada beso el sabor de la sal y la arena mientras hacen el amor en la playa donde pasan la luna de miel. Ambos niños tímidos en el colegio y tomados como aburridos en la universidad. Desafían el pensar de los otros besándose cada tanto, tomándose de las manos y sonriendo como si el andar de los relojes los dejara fríos en cualquier instante. Están parados en la fila, uno junto al otro, abrazados. Fue, es y será son para ellos tan diminutos que no quieren perder ni un aliento, quieren usarlos todos respirando al otro con pasión y sin lamento de los ojos ajenos.

Los novios se besan y se esconden en los baños del colegio para evitar ser vistos leyendo sus libros favoritos, la tía acaricia la foto del actor sin camisa y echa la culpa a su hermana mayor por romper el tazón favorito de mamá, el chico de cabello rojizo mueve sus pies al ritmo de la batería en sus auriculares y jala el cabello de la niña que le gusta en el parque de la primaria, el padre le escribe un mensaje a su esposa para avisar que llega tarde porque la fila está larga y toma de la cintura a su novia en la fiesta del bachillerato mientras la besa con pasión y un fuerte aliento a alcohol, y llegamos y tomamos nuestro puesto en la fila.

 

Esta historia que fue breve es tal vez eterna, los lazos se cruzan, las vidas no tienen final ni comienzo y todo en algún momento vuelve a pasar. Esta historia tal vez fue breve, tal vez será breve, tal vez nunca será. Y vuelvo a escribirla una y otra vez agregando unas pocas palabras cada vez, esperando en la fila, temiendo del tiempo, de los verbos y la realidad, temiendo que la fila dure tanto como una eternidad.

 

Cuando llegamos a la fila había ya antes de nosotros muchos más, era larga, será larga, es larga la espera de aquellos que esperamos algo inexistente.